lunes, 11 de junio de 2007

Trujillo ... ¿Periodismo - Literatura?

Por: Deborah Mendocilla Polo

Periodismo parece confundirse, en este "rebelde" que con aceptación de unos y temor de otros, ingresa en el mundo de las letras para aclarar que la realidad - ficción no siempre marchan solas.

La tesis de que no se puede confundir literatura y periodismo oponiéndose a los polos realidad - ficción no es grato y menos aplaudible, es grato adquirir conocimiento de una tesis que no avala la belleza en escritos periodísticos que no responde a la realidad de una literatura real. Pensar que el periodismoee y la literatura son excluyentes es totalmente herrado.

Si bien es cierto al hablar de escritor-literato se acoge en la memoria al escritor-periodista sin embargo es falso sostener que en la escritura no se confunda realidad ficción. El escritor periodismo no es insensible al expresar un mensaje utilizando técnicas que producen un discurso director y accesible, casi siempre noticioso.

Por otro lado es falso decir que el escritor-literato se vale únicamente de ficción, creación y no realidad, tan falso como decir que Truman Capote imagino a dos asesinos y escribió su obra maestra "A Sangre Fría'' tan falso como aclarar que Pérez Reverte nunca fue corresponsal de guerra, que cada dura experiencia fue invento y que “Territorio Comanche" no es real.

Desde la época de los años 80.Trujillo señorial respondió al eco periodístico y literario de toda una generación “La Primavera" - un exponente quincenario social - las voces de talentosos escritores se impregnaban sobre el papel cumpliendo con una difusión de producción literaria, pero a la vez convirtiéndose en un referente informativo de la actividad cultural en el Perú; es decir, medio informativo exquisitamente literario y a la vez periodísticamente referencial.

Hablar del nuevo periodismo parece recordar, para quien se ha olvidado, que la profesión no significa únicamente noticias. Se habla del reportaje sobre el esquema donde se puede plasmar belleza, para quienes aún no abogan por mi tesis, hablo de literatura.

Si, el reportaje ofrece entrevistas, información pero también el uso de recursos literarios que logra captar la atención de propios y extraños. Así como el reportaje la crónica y el testimonio hacen su aparición como las mejores y las más claras muestras de que aún en la objetividad del periodismo el arte literario siembra sus frutos. Es inagotable entonces, la apelación a comprender que no es aceptable matricularse en la idea de que periodismo - literatura se presentan como una pareja excluyente.

Truman Capote es un escritor de aguda visión, con talento reconocible y como autoridad indiscutible en el arte de escribir nos presenta un género que sin escapar de añoranza pasadas, está logrando cimentar sus bases en mentes críticas y preferencias literarias. La novela de no-ficción, es el nexo en la actualidad - entre literatura y periodismo. No se puede postergar la idea de que Capote, con habilidad y belleza ha tomado de uno lo que pudo insertar en el otro.

Contar una historia real con personas y circunstancias a partir de un hecho noticioso para involucrarlo con un descarnado realismo, en una estructura literaria le ha valido a Capote ser el referente primero de un género que sin intentar confundir literatura-periodismo, comprende su necesaria amalgama.

Más, es necesario argumentar que el tema "Periodismo-literatura" y su simbiosis no se responden en la actualidad. Muchos escritos literarios han tomado desde antes de la aparición del género de la novela de no-ficción, la realidad de hechos noticiosos, sucesos en los reportajes o en crónicas creando así artísticamente con estructuras literarias obras que sin escapar a la ficción embellecen páginas en blanco. Muchos autores desde hace varios años vienen trabajando con la técnicas de la literatura y el periodismo, respondiendo asía una responsabilidad social.
Grupos literarios trujillanos, como "Cuadernos trimestrales", "Trilce", "Peña del Mar", "Grupo Trujillo" de talentosos integrantes comprendieron como hoy, la necesidad de esa dicotomía literatura-periodismo. Casi todos los promotores de estos grupos artísticos han cumplido con el papel de escritor-periodista y escritor-literato.


Tal es el caso de un representante liberteño que ha hecho de la crónica su mejor carta de presentación... "Es cierto que nuestra profesión de fe era la prosa y la poesía y que ninguno mostraba pretensiones ni envanecimiento...", comenta en alusión a su querida “Peña del Mar”,Manuel Jesús Orbegoso. Él es el estandarte de tal grupo es el reflejo de una realidad que lejos de sentirse mayoritariamente literaria, comprendía la dicotomía, tanto que en su caso, vio en el "Liberal" la práctica de literatura con el pretexto de ejercer el periodismo, proponiendo a otros compañeros oficializar un grupo bajo la egide de la libre expresión de la palabra, del sentimiento; así al apasionado literato aún non vislumbraba su talento periodístico como estructuras literarias. Sin duda su literatura le sirvió como base para su talento sobre la crónica periodista.
Por otro lado el defender la postura “literatura - periodismo” como una pareja nada dispareja es consecuentemente avalada bajo la premisa “el pública busca una literatura real” captar la elección del lectora nunca ha sido fácil, menos cuando existe tantos medios informáticos. Por ello la prensa comprende la necesidad de insertar en un reportaje -crónica o testimonio una estructura literaria con esa belleza y noticia inigualable; mientras por otro lado los literatos han comprendido que si quieren ser leídos, la verosimilitud es elemental y que la ficción no identifica tanto al lector como la propia realidad.

La Capital de la Primavera ha mostrado sus mejores flores; casi todos con perfumes que metafóricamente resultan el binomio tan mencionado. El miedo a comprender que la literatura y el periodismo se confunden puede ser relativamente comprensivo, sin embargo, es prudente aclarar que no se busca ni de pretende ubicar al periodismo como sinónimo de literatura. Más se intenta demostrar que los escritos no puede ni deben ser excluyentes… ofrecen más como aliada que como enemigos.

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